Franquicias y Responsabilidad Social
La razón, la mayor preocupación por parte de la ciudadanía respecto a temas sociales y que a su vez no dejan de ser potenciales clientes. En palabras de Andrés Pastor, director adjunto de la Fundación Empresa y Sociedad, «en 2003, sólo un 10 por ciento de las firmas tenía proyectos avanzados, más allá de objetivos filantrópicos o de márketing. Este año, el porcentaje ha superado el 30 por ciento».
Esta fundación ha desarrollado un informe recientemente en el que se reconoce que la acción social «está pasando rápidamente de la filantropía a la estrategia». Esto significa que las empresas empiezan a percibir los beneficios que tiene un buen plan social y que este no debe reducirse a apoyar una causa social en un periodo de tiempo determinado sino que los auténticos réditos se obtienen cuando el programa es continuado y crea realmente una filosofía empresarial. Esta responsabilidad, que lleva fraguándose un tiempo, ha llevado a un buen número de franquicias a acometer planes de acción social que les permite devolver a la sociedad parte de los beneficios que ésta les aporta.
Sin duda alguna, si hablamos de responsabilidad social, uno de los más claros referentes en nuestro país es MRW. La cadena de franquicias de mensajería lleva desarrollando continuados planes de acción social desde 1993 y encabeza año tras año unos de los principales rankings sobre empresa y responsabilidad social en nuestro país, elaborado precisamente por la mencionada Fundación Empresa y Sociedad. Y es que recientemente, junto con Telefónica e Iberia ha sido considerada como una de las tres empresas mejor percibidas por sus programas de acción social.
En palabras de Martín Frías, «a lo largo de este año hemos realizado numerosas actividades que son tanto la continuación de nuestro proyecto, como la proyección del mismo hacia un futuro que esperamos sea apasionante. Nuestra estructura, basada en el sistema de franquicias, tiene como factor diferencial la unión de cientos de empresarios y emprendedores bajo una apuesta común: la sostenibilidad de nuestro proyecto empresarial gracias a la confianza que creamos en el entorno objeto de nuestra actividad». Y deja clara su filosofía de empresa, «entendemos MRW como un concepto nuevo de empresa que genera valor incorporando a la tradicional dimensión económico-financiera la importancia de nuestro equipo, la sociedad y el medio ambiente».
Otra de las franquicias con una amplia experiencia en este ámbito, y a nivel internacional, es The Body Shop. Esta cadena de productos de cosmética desarrolla diversos planes sociales desde hace varios años como los proyectos «Ayudar Comerciando», centrados en el comercio justo con países del tercer mundo o su «Premio a los Derechos Humanos» que reconoce la labor a este nivel de los distintos proveedores con los que trabajan.
Por su parte, la multinacional de la hamburguesa, Mc Donald´s, es una de las enseñas más experimentadas en este ámbito. Su fundación, que abrió la primera casa R. McDonald hace más de 30 años, ha evolucionado de forma considerable. Actualmente 213 casas R. McDonald operan en todo el mundo y están destinadas a niños que, junto con sus familias, han de trasladarse lejos de su residencia habitual para recibir tratamiento médico de larga duración. En España la casa que existe desde 1997 está ubicada en Vall de Hebron, en la provincia de Barcelona.
Otra de las enseñas que llevan tiempo desarrollando distintos planes sociales es la cadena de tintorerías Pressto. Para ello han creado el denominado Fondo Solidario de esta cadena, dotado con 30.000 euros y que actualmente celebra su V edición. La cuarta edición ha recalado en el proyecto «Save the Children», destinado a mejorar el nivel educativo de los niños y adolescentes de escasos recursos de las comunidades rurales de Cantar Gallo y Taqo Pampa (Bolivia).
La cadena de heladerías Ben &, Jerry´s, por su parte, lleva desarrollada una labor importante en EE.UU, donde invierte el 7,5% de sus beneficios antes de impuestos a fines sociales. Aquí en España, aún está lejos de su matriz y por el momento se conforman con colaborar con determinadas asociaciones mediante recaudación de fondos y otras actividades. Asociaciones infantiles como Menudos Corazones, asociaciones de dicapacitados psíquicos o asociaciones enfocadas a la naturaleza como Adena son sus destinatarias.
En el área de agencias inmobiliarias hay ejemplos como Re/Max y su plan «Re/Max for kids» que ha recaudado más de 36.000 euros para Aldeas Infantiles SOS en su primer año de vida. A este plan se han inscrito 186 integrantes de la red de franquicia, lo que supone un 25% del total de la red. El objetivo es que la recaudación se done de forma local con el objetivo de beneficiar a la propia comunidad.
Core, la cadena dedicada a la compra de consumibles usados, tanto de impresoras como de todo tipo de accesorios de informática, colabora actualmente con UNICEF al que ha hecho entrega de una donación de 15.000 euros y anteriormente lo hizo con la FAD (Fundación de Ayuda contra la Drogadicción).
En definitiva, estos son sólo algunos ejemplos de cómo la empresa y más concretamente las franquicias apuestan por cumplir con la famosa norma de devolver a la sociedad parte de los beneficios que la sociedad nos reporta. Como se suele decir, no están todos los que son, aunque sí son todos los que están. La franquicia demuestra, una vez más, que puede ser la punta de lanza de las pymes, también en temas de responsabilidad empresarial.
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