Empresas más seguras de día y de noche
Sus servicios se han convertido en una necesidad para muchos negocios. Las empresas de sistemas de seguridad han traspasado sus fronteras pasando a ser un complemento legal e indispensable a la hora de poner en marcha un negocio.
A la hora de elegir uno u otro sistema de seguridad no se puede hacer a la ligera o por capricho del personal de seguridad. Antes de su elección hay que tener en cuenta la ley y un estudio realizado por profesionales del sector en el que se ha elaborado un plan de seguridad donde se establecen los protocolos de actuación del personal y qué sistemas son los más adecuados.
En esta tarea de protección es muy importante la prevención, por lo que los sistemas de seguridad engloban desde la detección de incendios, la intrusión, el control de accesos o los monitores que deben estar lo mejor integrados posible para ofrecer información valiosa al personal de seguridad en la prevención de incidentes.
Por ejemplo, los centros comerciales se diferencian de manera importante de otros lugares a proteger por el mero hecho de la gran afluencia de personas que hay en ellos. Según el director empresarial de la cadena de empresas de seguridad Pelco España, Joan Balaguer, “el primer objetivo a proteger no son los bienes, sino las personas”, afirma, “La sensación de control que puede percibir un usuario de un centro comercial por el hecho de instalarse sistemas antihurto y cámaras de seguridad es solamente la punta del iceberg de un plan de seguridad de un centro comercial, donde el principal motivo de ser son las personas, aunque éstas perciban que lo que está siendo protegido son los productos que allí se venden.
En cuanto a la prevención de robos en diferentes negocios se pueden instalar diferentes sistemas para tomar medidas encaminadas a prevenir y dificultar las visitas de los cacos en los momentos en los que los establecimientos permanecen cerrados como las alarmas simples, un sistema acústico cuyo objetivo es disuadir, el inconveniente es que no tiene conexión externa se limitan a sonar y se pueden neutralizar fácilmente, porque están a la vista.
Por otro lado, encontramos los detectores volumétricos, que captan el movimiento de cualquier cuerpo u objeto en el campo de actuación determinado por la longitud de onda. En inconveniente es que suelen dispararse fácilmente y provocar falsas alarmas.
Los detectores por infrarrojos analizan las variaciones térmicas que se producen en su radio de acción. Al intruso le delatan los 37 grados de su cuerpo. Los más modernos incorporan en un solo aparato detectores volumétricos e infrarrojos.
Los detectores por ultrasonidos detectan ruidos extraños, como roturas de cristales y similares, por lo que se suelen colocar en ventanas.
Para el hogar también encontramos contactos magnéticos para puertas y ventanas. Son placas imantadas que crean un campo magnético que hace saltar la alarma cuando alguien trata de abrir la ventana.
La primera edición del Barómetro mundial del hurto en la distribución, realizado por el Centre for Retail Research (Nottingham, Reino Unido) y patrocinado por Checkpoint Systems, Inc., aporta datos sobre los índices reales de pérdida desconocida y delincuencia de 32 países de todo el mundo, entre ellos España.
De la investigación se puede extraer que en España, las pérdidas de la distribución por hurto ascienden a 2.645 millones de euros en 2007. Esta cifra representa el 1,28% de las ventas de este sector y supone un ligero descenso con respecto al 2006, cuando el índice era del 1,29%.
Se calcula que la distribución española gasta 827 millones de euros en seguridad.
Se da la circunstancia de que en nuestro país el 75% de los hurtos son cometidos por personas menores de 30 años, destacando la franja de edad entre 18 y 25 años. El importe medio del robo es de 30 euros, siendo los días viernes y sábados los de mayor incidencia de hurto. Cabe subrayar que el 8% de estos actos son cometidos a la misma vez que se compra otro producto. También es significativo el robo de productos de marca, sobre todo entre los 30 y 35 años.
También es relevante el hurto por necesidad, cuya incidencia va en aumento. El 53% de dichas pérdidas derivan de hurtos de clientes, mientras que el 24,6% son hurtos de los propios empleados. El resto de las causas se reparten entre hurtos de proveedores (8,8%) y errores internos (13,6%).
Con estos datos no es extraño que los minoristas sean cada vez más conscientes de que tomar medidas para reducir los índices de robo influye directamente en una mejora de su negocio.
Los expertos en sistemas de seguridad aseguran que es imposible hablar de precios de forma genérica pero lo que es importante tener en cuenta en el estudio de la inversión es su fiabilidad, que dependerá de la calidad de sus componentes, y una parte muy importante que es el mantenimiento. Por todo ello es muy importante confiar estos sistemas en empresas especializadas en seguridad y con las inscripciones y homologaciones correspondientes.
El precio de mantener un local seguro depende de un estudio previo del lugar concreto con todos sus factores como su extensión, el personal, la afluencia de clientes o su ubicación.