Telefónica ofrece telecomunicaciones e informática a pymes
El tejido empresarial español está compuesto en su inmensa mayoría de pequeñas y medianas empresas. Nueve de cada diez empleos que se crean en nuestro país lo hacen en estas sociedades y es por eso que las grandes compañías proveedoras de servicios han comenzado a fijarse en las pymes con el fin de ofrecerles soluciones a la medida de sus necesidades. Telefónica de España quiere ser no sólo el proveedor tradicional de sistemas de comunicación sino el gestor integral de todas las tecnologías relacionadas con la información (redes, informática, comunicaciones, datos…).
No todos los puestos de trabajo ion iguales, ni tampoco las necesidades, porque las funciones de cada uno de ellos son diferentes. Es necesaria una respuesta a la medida de cada puesto de trabajo.
Consciente de ello, Telefónica ha diseñado su estrategia en el desarrollo de soluciones que combinan productos y servicios como ordenadores personales o redes con servicios añadidos de carácter horizontal (mantenimiento, renting, renove…), que permiten dar una respuesta integral a cada una de las necesidades de un puesto de trabajo.
La compañía operadora ha denominado a estas soluciones integrales «puestos de trabajo». Pero, ¿qué entiende Telefónica por puesto de trabajo? Todos los elementos de comunicaciones e informática necesarios para que un empleado de una empresa cliente pueda trabajar por una cuota fija al mes.
Soluciones a la medida
«Respuesta Empresarios» es el nombre elegido por Telefónica para este programa dirigido, básicamente, a pequeñas y medianas empresas de entre 10 y 250 trabajadores y adaptado también a las necesidades de las llamadas micropymes, empresas que no cuentan en su plantilla laboral con más de diez empleados.
La idea surgió hace un par de años cuando Telefónica lanzó un producto que consistía en un ordenador con conectividad. Ahora, sobre la base de eso que en un primer momento no era más que una sencilla oferta, la compañía ha decidido ampliar los servicios y adaptarlos a las necesidades de los tiempos, incluyendo en su respuesta lo último en tecnología.
El objetivo final es que «el cliente, una pequeña y mediana empresa, sólo tenga que preocuparse de su negocio, de las telecomunicaciones, en cualquiera de sus aspectos, nos ocupamos nosotros», señala una fuente de la compañía operadora. «Excepto el mobiliario, le instalamos y mantenemos todo lo demás: sus comunicaciones de voz, de datos, el equipamiento informático…».
Telefónica ha dividido sus soluciones en tres tipos, con varias opciones para cada una de ellas: puestos de voz (líneas, terminales, mantenimiento), puestos informáticos (ADSL, ordenadores personales, LAN, mantenimiento) y puestos integrales (voz más informática).
Lo que parece cada vez más demostrado es que la simplificación de los procesos es una herramienta clave para el buen funcionamiento de las empresas. Cuanto menor sea el número de proveedores que intervengan en el proceso más rápida y eficiente será la instalación y su mantenimiento integral.
Por regla general, las pequeñas y medianas empresas huyen de las complicaciones. Su propia estructura hace necesario confiar la solución de sus necesidades a especialistas. El mantenimiento es una pieza clave en el engranaje de la «Respuesta Empresarios» de Telefónica. Para ello, la operadora facilita la solución de cualquier imprevisto sin tener que acudir al puesto de trabajo en función del mantenimiento que cada empresa tenga contratado. La asistencia cubre incluso las tareas en el propio puesto de trabajo.
La solución a un problema
Dicen las estadísticas que uno de los principales problemas de la pequeña y mediana empresa en España es su bajo nivel de informatización. Quizás porque muchos de estos empresarios asocian la disponibilidad de ordenadores personales con inversiones cuantiosas, sin reparar en las mejoras de productividad que suponen.
Tener lo último en comunicaciones y tecnologías de la información no es tan caro como pudiera parecer. La adquisición de un paquete de servicios integrados puede hacerse desde una mínima cantidad mensual. En muy poco tiempo, el empresario notará cómo mejora la productividad y el rendimiento de sus trabajadores. No se puede olvidar que, en la actualidad, las necesidades de comunicación se han disparado, sin que por ello tengan que resentirse los gastos en los que incurre una pequeña y mediana empresa en este capítulo, que en muchos de los casos puede llegar a representar un alto porcentaje del total.
La implantación de las nuevas tecnologías en el tejido empresarial español, sobre todo en la pyme, se ha convertido en uno de los retos más fantásticos para las administraciones. De ahí, la apuesta por el uso de las tecnologías de la información que están haciendo tanto la Administración central del Estado como las administraciones autónomas y las corporaciones locales.